Nacer, crecer, reproducirse y morir, ha sido el “ciclo de vida” tal y como nos lo han enseñado en la escuela.
Ahora, estudiar, tener una profesión, un trabajo “estable”, casa, carro, beca, viajar, casarse, tener una familia “normal”, se nos ha vendido también como el “modelo de vida”, por muchos medios, incluso en nuestras mismas familias.
De hecho, vivimos en una carrera por tener todas estas cosas de las que se supone trata la vida, pero pregunto ¿es en verdad esto LA VIDA?.
Si cierras los ojos, respiras y piensas… “VIDA”… a caso no se siente que suena más como a creación, naturaleza, fortaleza, alegría, libertad, florecimiento, compasión, expansión, belleza, agua, viento, pájaros… vida!.
Estamos tan desconectados de la vida misma que ni reconocemos lo esencial en esa carrera por conseguir cosas y obtener logros. Tan desconectados que no entendemos ni dimensionamos el daño causado a otras especies.
Es importante recordar que la vida de otros no existe para que yo haga uso de ellos para mis fines y beneficios, si no que existen por sus propias razones y guardan un equilibrio en este planeta que nuestra mente humana tal vez no alcanza a imaginar.
TODO ESTÁ CONECTADO. La Vida, al igual que la Paz y la Libertad, son inherentes a cada ser sobre el planeta. Y en tu fuero interno quisiera que te preguntaras sinceramente ¿Quién soy yo para creer que puedo tomar la vida de otro ser?.